Internet no solo ha cambiado la manera en la que hacemos negocios, sino también la forma en que conseguimos los recursos para iniciar un negocio,

Si vas a iniciar un proyecto y necesitas recursos para ello, solo tienes dos opciones: Puedes pedir un préstamo, o conseguir socios capitalistas. ¿Cierto? Afortunadamente hoy en día, están surgiendo nuevas opciones, entre ellas, el crowdfunding.

¿El qué?

El término crowdfunding se ha difundido mucho en los últimos cinco años y se ha vuelto cada vez más frecuente. Proviene del vocablo en inglés crowd --que hace referencia a multitud-- y fund -- que literalmente quiere decir fondo o recurso, pero que hace referencia también al término financiamiento. Es decir, crowdfunding hace referencia a un modelo de financiamiento colectivo a través de una convocatoria abierta.

Suena complicado, pero en realidad el financiamiento colectivo es un sistema de cooperación muy sencillo que permite reunir una suma de dinero considerable entre muchas personas para apoyar una determinada iniciativa. A cambio de su participación en el proyecto, los cofinanciadores -- como se suele llamar a las personas que apoyan proyectos-- reciben recompensas no monetarias, que pueden ser desde agradecimientos personalizados en la web del creador, pasando por la pre-compra de productos o servicios a un precio inferior antes de ser lanzados al mercado, e incluso la posibilidad de obtener un puesto de trabajo en la futura empresa.

Todo esto se realiza a través de sitios web en los que cada emprendedor expone su proyecto y define el monto que necesita para llevarlo a cabo, así como una fecha límite para recaudarlo. Cuando el proyecto alcanza el 100% del monto indicado, antes de su fecha de expiración, se le otorga el monto establecido. En caso de que el proyecto no alcance la meta en el tiempo límite, el creador no recibe el monto recaudado y todas las contribuciones de los co-financiadores son reembolsadas. En este modelo todos ganan ya que el emprendedor o creativo financia su proyecto y comparte su idea con una comunidad cada vez más importante. El co-financiador elige los proyectos o productos que desea apoyar y además, se incentiva al emprendimiento creativo y a la innovación de los nuevos emprendedores. Por su parte la plataforma obtiene un pequeño porcentaje de lo recaudado.

¿Cómo surge esta idea?

Desde que inició la democratización de la web, se comenzaron a difundir proyectos abiertos en los cuales los desarrolladores abrían su información de manera pública y desinteresada para buscar mejores soluciones a determinados problemas. De ahí surge el término Open Source. Ante el éxito de sus creaciones y también a la necesidad de continuar su trabajo, comenzaron a solicitar donaciones. La respuesta fue mayor a lo esperado; así surge entre los creadores (que requerían de financiamiento) y los usuarios (que demandaban proyectos creativos y pagaban por ellos) el crowdfunding o el financiamiento colectivo, como una nueva opción para financiar, en un primer momento, proyectos creativos e innovadores.

Aunque en los países desarrollados este modelo ya es cosa de todos los días para los emprendedores con sitios como kickstarter, en México apenas está iniciando. Existen algunos sitios como fondeadora.mx e idea.me que están mostrando que este modelo de financiamiento sí funciona.

Cross-Post: http://amiagencia.com/es/blog/negocios/que-es-el-crowdfunding/